BIIANCO viene haciendo ruido hace rato, pero con “Bruv Parade” se mete de lleno en el terreno. La productora, DJ y artista queer, que además vive con pérdida parcial de la vista, ya había demostrado que no tiene límites.
Su versión acelerada y sarcástica de “Loveparade” de Da Hool no es una simple reinterpretación, te hace volver a la nostalgia rave con una vuelta de tuerca moderna que no se guarda nada.
La base es rápida, bien marcada, con una percusión que empuja todo el tiempo. Pero lo que realmente se impone es ese bajo grueso que se arrastra con fuerza, casi como si te estuviera llevando de la mano a lo desconocido.
Sobre eso, aparece el famoso riff, pero retorcido casi provocador, como si se riera un poco del original mientras lo celebra. Las voces aparecen justo donde tienen que estar, con frases como “this ain’t THAT song”.
Es divertida, directa, caótica, y BIIANCO sabe cómo construir ese tipo de música que funciona en un club lleno, pero también deja algo dando vueltas cuando se apaga todo.
No hay mucho que analizar en términos técnicos, esto es energía pura. Si lo tuyo es el baile, el ruido, y la sensación de que algo se te viene encima a toda velocidad, este tema cumple.
Y si no, igual vale la pena escucharlo por lo que representa, un homenaje con identidad propia hecho con picardía y precisión.
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