Chloé French una joven de 24 años oriunda de Ginebra y formada también en Nueva York. Su música revive el brillo del disco francés de los sesenta y lo funde con sonidos urbanos actuales. Tras su primer sencillo este verano, llega “Messy (but French)”, una versión en francés de la canción de Lola Young, con una apuesta en transformar lo crudo en algo elegante y bailable.
Hay una cadencia que te hace mover, con bajos que empujan suave y sintetizadores que dan ese aire chic y nocturno. Al eliminar la aspereza confesional del tema original, Chloé introduce una vibra refinada.
La interpretación en francés embellece cada línea, haciendo que cada sílaba se sienta íntima y hecha para florecer en pistas de baile y cafés con humo.
Se escucha el desorden en lo emocional, pero envuelto en una envoltura sonora que recuerda a películas clásicas y clubes urbanos a la medianoche.
Es confesional sin ser brutal, sensual sin ser exagerada y esa mezcla genera una sensación de complicidad, como si te susurrara secretos mientras gira la música.
Es un puente entre mundos donde el dorado pasado del disco francés y la frescura actual del pop independiente, que establece el estilo propio de Chloé.
Como adelanto de su EP "The NYC Tapes", que llegará en enero de 2026, este tema ya marca una identidad, la de alguien que sabe exactamente lo que quiere decir y cómo hacerte escuchar con atención, te envuelve y no te suelta.