Desde Bolton, Inglaterra, el dúo Guri Yeller continúa marcando su identidad con su nuevo lanzamiento doble “Black Shoes | Sister Misery”. Después de un acercamiento más electrónico en su anterior trabajo "Seeing Double", esta entrega representa un giro directo hacia el shoegaze más clásico, pero sin dejar de sonar actual.
Su sonido recuerda a bandas como My Bloody Valentine o Slowdive, pero con una sensibilidad moderna y un enfoque más introspectivo.
“Black Shoes” abre con una base rítmica espesa y nublada, donde las guitarras parecen flotar y al mismo tiempo pesar. La voz aparece lejana, casi escondida, pero cumple con su rol emocional sin imponerse.
La sensación general es como caminar solo en una ciudad húmeda, pensando demasiado. Hay capas que se van apilando sin estorbarse, y aunque la estructura no es lineal, eso le da una atmósfera inestable que funciona a favor.
“Sister Misery” mantiene el clima pero lo empuja hacia algo más reflexivo con un tono más melancólico y más arrastrado. El bajo toma más protagonismo y las guitarras, aunque menos densas, siguen construyendo una especie de niebla emocional.
No hay sobresaltos, pero sí un sentimiento de que algo se desarma lentamente. Ambas canciones se sienten hermanas, pero no idénticas y cada una cuenta su propio momento dentro del mismo paisaje.
Cómo dato extra, el dúo también confirmó presentaciones en el norte de Inglaterra para finales de 2025.
Este lanzamiento tiene algo que atrapa y es un paso firme hacia una identidad más definida, más suya y consciente de su camino, incluso si ese camino está cubierto de neblina.